Han sido meses de mucho trabajo: documentos, reuniones, negociaciones; hemos tejido acuerdos con otros sindicatos, con empresas de las artes escénicas y del audiovisual, así como con las plataformas y las televisiones. Ha sido un gran esfuerzo de toda la Unión, con la vista puesta en mantener a España como un referente artístico, cuidando a quienes lo hacemos posible, los trabajadores.​ El resultado merece la pena.

Hemos alcanzado avances importantes para los que seguimos luchando para que se conviertan en realidad este mismo año. La primera regulación laboral de la inteligencia artificial en nuestro país marca un paso decisivo que permite usar las herramientas que apoyan la producción sin perder el control de nuestra imagen ni de nuestra voz.  Hemos aprendido de la experiencia de los sindicatos de Estados Unidos, Alemania o Italia y queremos situarnos entre los pioneros de la industria. Contamos también con una protección para menores unificada en todo el país con criterios claros y autorizaciones transparentes conocidas por familias y menores. Hemos reforzado una atención especial a la igualdad ligándola a la intermitencia de la profesión y reforzando medidas clave, como protocolos claros y la coordinación de intimidad obligatoria.