El pasado 24 de abril se estrenaba una nueva serie internacional sobre uno de los pintores más importantes de nuestro país: "Picasso", y como actor protagonista no podría ser otro que nuestro representante más internacional, Antonio Banderas, poco se puede decir ya de su increíble carrera en Hollywood, uno de los primeros intérpretes españoles en tener un gran éxito al otro lado del charco.
Muchos han sido los que han seguido sus pasos en el mercado americano como son los casos de Javier Bardem, Penélope Cruz, Jordi Molla, Paz Vega, y muchas y muchos más que cada vez cuentan más en las producciones fuera de nuestras fronteras, que no solo realizan su carrera en la mayor industria del mundo audiovisual, casos como los de Victoria Abril, Marisa Paredes o Sergi López.
Aunque no son los únicos que tienen la suerte de trabajar en otros mercados internacionales, cada vez son más los casos de grandes intérpretes que buscan sus oportunidades fuera de nuestras fronteras, como podría ser el caso de Aroa Gimeno, conocida en nuestro país por series como SMS o Sin tetas no hay paraíso, se ha hecho un hueco en las pantallas de México donde, desde su llegada ahora cinco años, no ha parado de trabajar y de labrarse un nombre. En una breve conversación se me ocurrió preguntarle cual fue el momento que decidió probar suerte en México. “No fue una decisión como tal... tenía ganas de un cambio, estábamos en plena crisis nacional y necesitaba dejar de escuchar la palabra 'crisis', con lo cual compre un billete de avión con la vuelta a los dos meses para visitar algunos amigos en México y cuando me dieron el permiso de trabajo para un año decidí quedarme para aprovecharlo ya que me seleccionaron para el largometraje Desde tu infierno que se rodaría en los siguientes meses”, me cuenta Aroa.
Pero, ¿cuál es la acogida de nuestros interpretes en ese Mercado?
México es un país muy acogedor y desde que llegué me sentí muy bien y hay muchas oportunidades de trabajo en el medio audiovisual. Ahora estoy en la segunda temporada de la serie La Piloto de Televisa con el personaje de una abogada, pero tengo ganas de volver a España y pronto volveré a estar por allí.
Mientras vuelve a nuestro país con las pilas recargadas, ya ha adelantado un poco su vuelta con el trabajo que realizo a las ordenes de Norberto Ramos en Call TV, y de que saltase la noticia de su éxito en Capo: el amo del túnel.
Hemos podido ver también en producciones internacionales a Sergio Peris-Mencheta en Snowfall de HBO, a Javier Cámara que igual trabaja para HBO en Young Pope como para Netflix en Narcos donde comparte protagonismo con Alberto Amman y Miguel Ángel Silvestre, el cual ya había dado un paso firme con su participación en Sense 8. También Carlos Bardem no para de trabajar para producciones en películas de Hollywood como Assassin´s Creed, junto con Javier Gutiérrez, y en series tan importantes como The Son o El señor de los cielos.
Para mí la sorpresa fue ver Knightfall en HBO sin saber que uno de los personajes importantes se trataba de Enrique Arce, muy conocido por su papel en Amar es para Siempre o La Casa de Papel, y curiosamente no había leído en ningún sitio de su participación junto a Nuria Casas, Miquel García Borda o Marcos Franz. Es curioso como parece que no se le da importancia a un actor o actriz en nuestro país cuando participa en una serie o película internacional, mientras que deportistas nacionales son seguidos jugando en ligas importantes y no tan importantes cuando salen de nuestro país.
Tuve la suerte de poder entablar una conversación telefónica con Enrique Arce para que me contará más sobre sus proyectos en el extranjero, ya que ha estado también en la co-producción Luso-brasileña Bad Investigate. "Es una película donde se habla en inglés, portugués y castellano, yo era el único actor castellano parlante, ha sido una gran experiencia", me dice sobre este film.
Enrique, ¿Cómo conseguiste tu papel para una serie internacional como Knightfall?
Para mi fue un verdadero regalo, trabajar en una producción que tiene 10 millones de euros por capitulo. Yo estaba viviendo en Londres y gracias a mi agencia de allí tuve la oportunidad de realizar la prueba, son esas cosas que crees que no van a salir, y me sentí muy afortunado al ser elegido, me ha reportado muchas cosas buenas, trabaje con actores de primer nivel, algunos de Downton Abbey.
¿Te ha abierto camino en el extranjero una serie como Knightfall?
Ahora estoy viviendo en Estados Unidos, moviéndome gracias a una buena agencia que me mueve por allí, y curiosamente me está abriendo más puertas si cabe La Casa de Papel. Creo que hay que arriesgarse y probar en otros países porque aunque el idioma sea otro, el lenguaje interpretativo es el mismo, no es tan diferente como puede parecer trabajar fuera, hay que tener un cierto dominio del idioma, apoyo económico por supuesto y tener buenos agentes que te ayuden a conseguir pruebas importantes. El mercado se está abriendo cada vez más.
No se les da mucha importancia a los actores y actrices que trabajan fuera de España, ¿por qué crees que puede darse esa situación?
Es verdad que siempre hay actores más mediáticos que otros, están Javier, Penelope o Antonio, pero somos muchos los que nos hacemos un huequito y aspiramos a por lo menos estar en esas producciones y es cierto que parece que no tenemos la repercusión que otras profesiones, pero yo creo que también estamos empezando a salir muchos y esa tendencia cambiará y la gente estará orgullosa de todos.
Fue un verdadero placer poder compartir unas palabras con Enrique, que gracias a su trabajo y constancia, trabaja cada vez en más producciones no solo dentro de nuestro país sino fuera de nuestras fronteras.
Tuve también la suerte de hablar con William Miller, ha participado en multitud de producciones españolas, muy conocido por nuestro público y que ha participado en producciones fuera de nuestro país como el éxito Los 100, Megan Leavy o The Medium. "Mi experiencia ha sido siempre positiva. Abrirse nuevos mercados es algo fundamental en nuestro trabajo. Las oportunidades en mercados reducidos como el de España, pese a que las nuevas plataformas nos están abriendo al resto del mundo, implican que, para los actores de carrera, uno debe centrarse en crear su propio trabajo. Una de las formas de hacerlo es investigar nuevos mercados. Es una inversión de tiempo y dinero, pero crea más posibilidades laborales para combatir la 'inestabilidad' de nuestra profesión", me comenta sobre estos trabajos.
¿Cómo ha sido tu experiencia cuando has trabajado fuera y que imagen tienen de nuestros intérpretes fuera de nuestras fronteras?
según el lugar; muy diferente. Hay mercados, como el latino americano, en el que tanto el idioma y los presupuestos son similares a los nuestros y, por lo tanto, la experiencia laboral es similar a la de España... se intenta hacer milagros con el dinero y tiempo del que se dispone, que nunca suele ser suficiente. El mercado americano es diferente... y la gran variable es la misma; tiempo y dinero. Son dos elementos que siempre mejoran el producto a todos los niveles: Más tiempo para escribir, más tiempo para rodar, que se traduce en más planos para montaje, más tiempo para afinar el trabajo actoral y más tiempo para post-producción. Todo esto suele desembocar en un producto de aspecto más cuidado. Los actores españoles estamos acostumbrados a trabajar bajo presión. Esto significa que no disponemos de muchas tomas para aportar nuestro pedazo de información y debemos ser más hábiles en cuanto a la preparación del personaje y la escena y más rápidos en la escucha y generosidad con los compañeros y la historia. Mi experiencia personal es que los americanos admiran esa preparación... con nosotros ya tienen nuestra parte en dos tomas, en las demás nos piden más opciones para montaje. También me he dado cuenta que al director al que le gusta trabajar con actores, escucha mucho a los que venimos con esa preparación.
¿Qué tiene que hacer un actor o actriz de aquí para que se reconozca su labor?
El mercado de “aquí” se basa en conceptos muy distintos. El sistema de subvenciones es y ha sido necesaria durante mucho tiempo.... el problema de esta es que puede resultar en una endogamia en la que se repiten las mismas fórmulas hasta la extenuación... Por eso siempre hemos hablado de “la misma gente y las mismas historias”. Esto está cambiando, la inversión de las grandes cadenas privadas está variando el panorama... el problema es que estamos perdiendo, en parte, esas historias más pequeñas e interesantes que siempre han caracterizado nuestro cine y la fórmula de “la misma gente e historias” se ha convertido en algo sujeto a la comercialización de un producto, que se traduce a estudios de mercado y redes sociales y seguidores... No sé cuál es la fórmula correcta... pero me gustaría que encontráramos un equilibrio en el que se pudiera dar prioridad a historias interesantes y a talento antes que celebridad y fama... El éxito nunca debe ser el objetivo.
Después de estas palabras no me queda nada más que añadir, no quisiera que nuestros talentos salieran fuera y se quedarán, pero si que sigan demostrando lo que valen tanto dentro como en producciones internacionales. Como último deseo…. que el público español valore la dificultad y la importancia que tienen las actrices y los actores que consiguen hacerse un hueco en mercados tan importantes.